El ensayo de resistividad eléctrica (SEV), basado en el método Wenner-Schlumberger, mide la capacidad del suelo para resistir el flujo de corriente eléctrica, crucial para estudios geotécnicos, hidrogeológicos y sistemas de puesta a tierra en proyectos de ingeniería civil y eléctrica.
En Ingemars, realizamos el ensayo de resistividad eléctrica (SEV) como parte esencial de nuestros servicios de caracterización del subsuelo. Utilizando el método Wenner-Schlumberger, colocamos cuatro electrodos en disposición lineal sobre la superficie del terreno, aplicando una corriente eléctrica controlada para medir las diferencias de potencial generadas. Esta técnica avanzada nos permite detectar variaciones en la resistividad a diferentes profundidades, identificando zonas con distintas características geológicas, como la presencia de agua, cavidades, o materiales conductores.
El SEV es fundamental para la instalación de sistemas de puesta a tierra, asegurando la adecuada dispersión de corrientes eléctricas y protegiendo estructuras y equipos. También es aplicable en estudios de hidrogeología, geotecnia, y exploración de recursos, proporcionando a nuestros clientes información crítica para la planificación y ejecución segura de sus proyectos de construcción y desarrollo.
Nuestro ensayo de resistividad eléctrica se distingue por su adaptabilidad a diferentes condiciones de terreno y su capacidad para ofrecer datos precisos sin necesidad de métodos invasivos. Entre los beneficios clave se encuentran:
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